Normalmente, en el blog de IATI Seguros, podéis leerme escribir sobre algunos de los lugares más increíbles que he tenido el placer de conocer viajando. Qué hacer en Bután, qué visitar en Cuba, consejos para hacer un safari por libre en Sudáfrica… En todos ellos suelo recomendar la importancia de viajar con un buen seguro de viaje y hoy, tras haberlo vivido en mis propias carnes, os puedo explicar mucho mejor por qué. Acabo de estar 3 semanas ingresado en un hospital de Filipinas.

 Experiencia con IATI de Jairo, de Viajar por Filipinas

Primeros síntomas

Mi historia empieza en Filipinas hace poco más de un mes. Tras llegar desde Australia con algo que parecía ser un simple constipado tonto, tomamos un vuelo a Tuguegarao, una ciudad sin pena ni gloria al norte de la capital filipina. Ahí, ese “constipado” se empezó a hacer más pesado y, aprovechando que había un hospital cerca, decidí acercarme a que me viera un médico.iati seguros opiniones

A primera vista parecía ser una simple gripe pero tras dos días fiebre que no bajaba y malestar general decidí volver al hospital. En esta ocasión me hicieron una radiografía que provocó un cambio total del diagnóstico: tenía neumonía.

En ese momento llamé al número de teléfono de mi póliza y les puse al día de todo. Además de preocuparse por mí, me dijeron que no me preocupara por el dinero. Pese a que ese hospital no tiene acuerdo con ninguna aseguradora, si guardaba todos los recibos e informes médicos y se los enviaba a IATI, me reembolsarían cualquier gasto. Alivio.

Empecé con la medicación para la neumonía con las palabras del doctor repitiéndose en mi cabeza “si en tres días no has mejorado vuelve al hospital y quizá debamos ingresarte”. Pasaron esos tres días y no solo no había mejoría, sino que me encontraba incluso peor. Entonces, la mañana que tenía que volver al hospital para quizá ingresar, llamé al número de IATI Seguros y les conté, además de cómo me encontraba, que el hospital de Tuguegarao distaba bastante de ser un lugar que me diera mucha confianza como para pasar ahí una sola noche.

10 minutos después de esa llamada, IATI me llamó para decirme que ya me habían comprado un vuelo a Manila para que pudiera ser visitado en uno de los mejores hospitales del país. Yo no pagué ni un céntimo por ello.

Ingreso en el hospital de Manila

Llegamos al hospital de Manila Makati Medical Center realmente convencidos de que me mandarían a casa con una medicación para la neumonía pero, tras una nueva radiografía, se confirmó que había bastante líquido en el pulmón y que, muy a mi pesar, me tenía que quedar ingresado alguna noche en el hospital hasta que la cosa mejorara.

En todos esos momento de impotencia, cansancio (el ingreso en un hospital siempre es lento) y confusión, IATI se encargó de contactar con el hospital para confirmar la garantía de pago y me dio una habitación privada donde ingresar.

experiencia con IATI Seguros

16 noches en el hospital

No entraré en detalles médicos personales pero durante mi estancia en el hospital hubieron algunas complicaciones graves y sumando la habitación, los gastos en medicinas, los doctores que me atendieron y las dos intervenciones que me hicieron para sacarme líquido del pulmón, la factura total superó los 15.000 €.

Una vez más, yo no tuve que hacerme cargo de nada y, de no haber contado con el seguro de IATI, me hubiese supuesto una ruina. Además de eso, el seguro se hizo cargo de:

– Vuelo de ida y vuelta de España a Filipinas para mi madre, valorado en uno 950 euros

– 90 euros de alojamiento al día durante 10 días para mi madre, 900 euros

– Un segundo ingreso hospitalario para mí, de un coste de 3000 euros

Todo ello suma unos 20.000 euros de los que solamente pagué las radiografías y medicinas del primer hospital, que luego IATI me reembolsó.

Con la salud no se juega

Por ello, jamás me casaré de decir una y otra vez que es imprescindible viajar con un buen seguro de viaje. Para mi es impensable no hacerlo. De la misma manera que el alojamiento o los vuelos (o cualquier otro tipo de transporte), el seguro de viaje forma parte de la base de mis viajes.

Además, no me gustaría acabar este texto sin remarcar el excelente servicio que tanto yo como mi familia recibimos durante todo el proceso. A diario recibíamos llamadas de Virginia, Laura, Paloma y el resto del equipo de IATI Médicos, preocupándose y acompañándonos en esos días tan duros. Los 20.000 euros ahorrados son mucho dinero, pero el cálido trato que recibimos, realmente no tiene precio (Ahora en su oficina tienen un gran ramo de flores que mi madre les envió como agradecimiento).