¿Estás deseando encontrar tu paraíso terrenal privado en Brasil? ¡Pues deja de buscar, en IATI lo hemos hecho por ti y ya lo tenemos! ¿No te lo crees? Lee todas las mejores cosas que hacer en Ilha Grande y después nos cuentas.
Ilha grande es una preciosa y salvaje isla que se halla al sur de Río de Janeiro. Para llegar a ella desde la famosa ciudad carioca tendrás que tomar un autobús – o coche -, viajar unas 3 horas (180 km) y detenerte en la pequeña población costera de Angra dos Reis. Desde el muelle de Angra parten lanchas rápidas que te llevan a Ilha Grande en poco más de 20 minutos.
Así será como podrás poner pie en este Jardín del Edén brasileño.
Ilha Grande es una de las ínsulas más grandes del estado, cubriendo aproximadamente 193 kilómetros cuadrados. Es famosa por sus playas vírgenes, aguas cristalinas y su exuberante selva atlántica, lo que la convierte en uno de los mejores lugares que ver en Brasil para los amantes de la naturaleza.
La historia de la isla es tan rica como sus paisajes. Ilha Grande – que alguna vez fue guarida de piratas y luego, durante la época colonial, sirvió de lugar de cuarentena para inmigrantes europeos y prisión – tiene un pasado histórico que se suma a su mística.
Como no se permiten automóviles en la isla, el ritmo de vida es lento y tranquilo, ofreciendo un refugio perfecto para quienes buscan relajación y aventura al aire libre en un entorno tropical idílico.
Contenidos
- 1 Disfrutar de la playa de Lopes Mendes, una de las mejores del mundo
- 2 Descubrir la vida local en Vila do Abraão
- 3 Subir al Pico do Papagaio
- 4 Descubrir la fauna y flora de Ilha Grande
- 5 Bucear en Ilha Grande
- 6 Disfrutar de la vida nocturna
- 7 Visitar Dois Rios
- 8 Probar la gastronomía brasileña
- 9 Relajarse o pasear en barco en Saco do Céu
- 10 Perderse por otras playas de Ilha Grande
Disfrutar de la playa de Lopes Mendes, una de las mejores del mundo
La playa de Lopes Mendes, con sus 3 kilómetros de longitud, está catalogada no sólo como la mejor que ver en Ilha grande, sino una de las mejores de Brasil y del mundo.
Las culpables de tal honor son sus prístinas arenas blancas y aguas cristalinas de color turquesa, ideales para darte un baño. Además, si quieres probar con el surf, te contamos que la suave pendiente de la playa hacia el mar crea olas perfectas tanto para surfistas principiantes como experimentados.
Otra gran opción para disfrutarla a fondo es realizar una caminata panorámica hasta la playa, comenzando en la playa de Pouso o Vila do Abraão, y pasando por la exuberante selva atlántica.
En definitiva, un lugar perfecto para quienes buscan un retiro tranquilo en la naturaleza.
Descubrir la vida local en Vila do Abraão
Vila do Abraão es la población principal que ver en Ilha Grande y el lugar en el que desembarcarás del ferry que te lleva a la isla.
Aquí encontrarás la mayoría de los servicios, tanto de alojamiento como de restauración, y es el punto de partida de numerosas excursiones. También cuenta con fantásticas playas de agua color esmeralda, como la Praia dos Meros, con algunos chiringuitos, restaurantes y bares donde comer o tomar un cóctel por la noche. Otra hermosa playa de Abraão es Praia Preta, con arena de un característico color negruzco.
La ciudad como tal es muy pequeña, pero tiene algunos lugares de interés que hay que ver. Ejemplos de ellos son las Ruinas do Lazareto, antiguo hospital para inmigrantes enfermos de cólera y, posteriormente, prisión; y un acueducto bien conservado.
Subir al Pico do Papagaio
Si te gusta la vida activa y quieres gozar de la mejor panorámica que ver en Ilha Grande, tienes que subir a la cima del Pico do Papagaio.
La caminata comienza en Vila do Abraão y tiene aproximadamente 7 kilómetros en cada sentido, tomando entre 6 y 8 horas de ida y vuelta. El sendero serpentea a través de la densa selva atlántica, brindando oportunidades para observar diversa vida silvestre y flora tropical.
La caminata es desafiante, presentando pendientes pronunciadas y un terreno accidentado, por lo que deberás estar en forma para afrontarla, además de llevar mucha agua, protector solar y repelente de insectos.
Es recomendable contratar un guía local por seguridad y para mejorar la experiencia con información sobre la ecología y la historia del área.
El esfuerzo se ve bien recompensado en la cima, donde las vistas de la isla, sus aguas circundantes y las masas de tierra vecinas, te dejarán completamente boquiabierto.
Descubrir la fauna y flora de Ilha Grande
Ilha Grande es un auténtico paraíso de biodiversidad.
La isla alberga una rica variedad de fauna y flora, que prospera en su exuberante selva atlántica y los entornos marinos circundantes. La vegetación de la isla incluye imponentes palmeras, bromelias, orquídeas y una gran variedad de helechos y otras plantas tropicales.
El denso bosque proporciona un hábitat para numerosas especies animales.
Entre la fauna, destacan los monos, como el mono aullador y el mono capuchino, así como una gran variedad de aves como tucanes, loros y la amazona de ceja roja, que se halla en peligro de extinción. La isla también alberga reptiles como lagartos y serpientes, además de una variedad de anfibios.
Sin embargo, son las aguas circundantes las que guardan la riqueza más colorida, estando repletas de vida marina. Te lo contamos a continuación…
Bucear en Ilha Grande
Explorar el fondo marino es una de las mejores cosas que hacer en Ilha Grande.
En ellas encontrarás, sin necesidad de descender a más de 3 o 4 metros de profundidad, tortugas marinas, delfines y una gran cantidad de peces y corales de colores.
Entre los mejores lugares para bucear en Ilha Grande destacan Lagoa Azul (Laguna Azul) y Lagoa Verde (Laguna Verde).
En las aguas cristalinas de Lagoa Azul, podrás nadar junto a peces ángel, peces loro y, a veces, tortugas marinas.
Lagoa Verde es famosa por sus tranquilas aguas de color verde esmeralda, donde se pueden observar diversas especies como sargentos mayores, peces mariposa y morenas.
Además, aquellos que bucean en Praia de Parnaioca y Praia de Japariz suelen encontrar rayas y coloridos peces de arrecife.
Disfrutar de la vida nocturna
Sí, es cierto que Ilha Grande es un gran lugar para descansar y desconectar de todo, pero también debes recordar que te encuentras en Brasil, un país donde la gente sabe divertirse a una escala memorable.
Para tener una noche animada en Ilha Grande, lo mejor es salir por Vila do Abraão, el principal centro de vida nocturna de la isla.
Allí encontrarás una buena variedad de bares y lugares junto a la playa donde poder disfrutar de una caipiriña mientras escuchas buena música y bailas.
Aquário Beach Club es un lugar popular, conocido por su ambiente festivo y eventos habituales, que incluyen música en vivo y actuaciones de DJ.
Para un ambiente más relajado, Café do Mar es una gran alternativa. Se trata de un bar frente a la playa que suele ofrecer música acústica en vivo.
Otra gran opción es el Bar e Restaurante Lua e Mar, con una combinación de buena comida, bebidas y entretenimiento en vivo.
Visitar Dois Rios
La pequeña villa de Dois Rios es uno de los lugares más interesantes y diversos que ver en Ilha Grande.
El pueblo, dedicado a la vida tranquila y la pesca desde siempre, es famoso por sus playas vírgenes, la playa Dois Rios y la playa Caxadaço, que ofrecen aguas cristalinas y un entorno tranquilo; su antigua prisión, convertida en un museo que ofrece una completa visión de la historia de la isla; y el Centro de Educación Ambiental que promueve la ecología local y los esfuerzos de conservación.
Dois Ríos combina belleza natural, intriga histórica y oportunidades educativas.
Probar la gastronomía brasileña
Como gran lugar en el que dedicarse a la buena vida, otra de las mejores cosas que hacer en Ilha Grande es comer bien.
La isla ofrece una rica experiencia gastronómica centrada en mariscos frescos y cocina brasileña.
Estamos hablando de camarones, calamares y moquecas, un guiso de pescado con leche de coco, tomates y pimientos. También son populares las ostras frescas y el ceviche, preparados con ingredientes locales. Además de mariscos, hay opciones de carne como churrasco y platos de pollo maridados con arroz, frijoles y farofa, una harina de yuca tostada. Las frutas tropicales frescas, como el mango, la piña y el maracuyá, son comunes en los postres y bebidas.
Las mejores opciones de restaurantes las tendrás en Vila do Abraão. Allí, Café do Mar es famoso por su comida frente a la playa y sus platos de mariscos, mientras que Lua e Mar ofrece un ambiente romántico con un menú variado que incluye especialidades locales.
Para una comida informal, Pé na Areia sirve excelente pescado a la parrilla y caipiriñas. El Restaurante Dom Mario es uno de los favoritos por sus abundantes platos de cocina brasileña y su cálido ambiente.
Relajarse o pasear en barco en Saco do Céu
Saco do Céu es un puerto natural perfecto para nadar y bucear en aguas tranquilas y claras repletas de vida marina.
La mata atlántica circundante ofrece excelentes oportunidades para practicar senderismo y observar aves, con rutas que conducen a miradores panorámicos y playas escondidas.
Cenar en los restaurantes locales, como Coqueiro Verde, brinda la oportunidad de saborear mariscos frescos mientras disfrutas de impresionantes vistas al mar.
Además, también puedes dar un paseo por el litoral en kayak, explorando la tranquila bahía y las calas cercanas. Por la noche, las aguas bioluminiscentes de la bahía crean una experiencia mágica, haciendo de Saco do Céu un destino único entre las cosas que ver en Ilha Grande.
Perderse por otras playas de Ilha Grande
Aunque te hemos recalcado la playa de Lopes Mendes como la mejor que ver en Ilha Grande, lo cierto es que podrías pasar una semana visitando arenales en este lugar y no te cansarías.
Otras de las playas que no puedes perderte aquí son: Praia do Aventureiro, famosa por su entorno salvaje y su icónica palmera inclinada, ofreciendo buenas condiciones para nadar y surfear; Praia de Palmas, tranquila y con aguas tranquilas ideales para practicar snorkel; Praia do Caxadaço, una joya aislada a la que sólo se puede acceder en barco o mediante una caminata desafiante por el interior de la selva.
Elijas la que elijas, seguro que no te equivocarás.
Artículo escrito por David Escribano, de Viajablog