25El Salvador se ha ganado el apodo de “El Pulgarcito de América” por ser el país más pequeño del continente. Pero no te dejes engañar por su tamaño casi insignificante, porque la lista de cosas que hacer en El Salvador puede ser muy extensa. En IATI, por ejemplo, se nos ocurren 8 razones por las que un viaje a este país merece la pena. Prepara tu equipaje, hazte con tu seguro para el viajero y pon rumbo ya a este increíble país.

Qué hacer en El Salvador

1. Subir a la cumbre del volcán Santa Ana

También conocido como Ilamatepec, este volcán tiene uno de los cráteres más impresionantes de Centroamérica. Para llegar hasta su cima hay que caminar durante poco más de dos horas entre bosques y plantas de maguey; y la recompensa final es una laguna de un intenso color turquesa desde la que parece que nazcan las nubes.

que hacer en El Salvador

2. Surfear en el Sunzal

La playa más popular de El Salvador es El Tunco, pero desde IATI queremos proponerte un destino diferente y más tranquilo: La playa El Sunzal.

Entre los entendidos, es conocida por ser una de las mejores playas para surfear del mundo. Además, queda a pocos kilómetros de El Tunco, por lo que es la playa ideal para disfrutar de un ambiente tranquilo y relajado sin perderte la actividad y los servicios turísticos que se pueden encontrar en la playa más visitada de El Salvador.

Y si te interesa el surf, tanto en El Tunco como en El Sunzal se alquilan tablas y se ofrecen cursos a precios muy accesibles. Sin duda, para los que se sienten atraídos por las olas, surfear es una de esas actividades imperdibles que hacer en El Salvador.

Surfear en el Sunzal El Salvador

3. Conocer la Pompeya de América

Quizás no sabías que en El Salvador hay una zona arqueológica declarada Patrimonio de la Humanidad. Joya de Cerén fue una aldea maya que quedó cubierta por las cenizas de un volcán. A diferencia de Pompeya, los habitantes de la zona pudieron huir, por lo que no hubo víctimas humanas, pero la similitud de los acontecimientos entre esta comunidad prehispánica y la antigua ciudad de Pompeya, han provocado que este pequeño yacimiento arqueológico sea apodado “la Pompeya de América”.

Pero lo que hace realmente interesante e importante históricamente a este lugar, es que las cenizas ayudaron a conservar buena parte de las viviendas de la aldea, por lo que se ha convertido en una excelente fuente de información para los arqueólogos sobre la vida cotidiana de las comunidades mayas de Mesoamérica.

Más información sobre Joya de Cerén en su página oficial.

Joya de Cerén El Salvador

4. Relajarse en Suchitoto

Suchitoto es uno de los pueblos más bonitos y pintorescos de Centroamérica. Se lo conoce por encontrarse cerca de una inmensa laguna, pero lo mejor de Suchitoto son sus pintorescas calles y plazas adornadas con flores y cubiertas de adoquines.

Aunque si te gusta la naturaleza, a poco más de una hora a pie puedes encontrar una cascada con curiosas formaciones rocosas que han dado pie a diferentes leyendas. Es conocida como Los Tercios y llegar a ella requiere un habilidoso descenso entre rocas gigantes, pero merece la pena el pequeño esfuerzo.

Suchitoto El Salvador

5. Hartarse de Pupusas

La pupusa es la reina de la gastronomía salvadoreña. De hecho, existe un Día Nacional en el país para celebrar este plato típico a base de masa de maíz o arroz rellena de vegetales o carne y queso. Se sirve acompañado de un curtido de verduras y salsa de tomate, y suele encontrarse en todas las calles de El Salvador durante la mañana y la noche. Comer varias pupusas a la semana es la base de una buena dieta para un salvadoreño, y es muy probable que acabes adoptándolas como parte de tu dieta diaria si viajas a El Salvador.

que comer en El Salvador

6. Conocer a los protagonistas de la guerra civil

El 15 de noviembre de 1979 inició uno de los periodos más dramáticos de la historia de El Salvador. Las consecuencias de la guerra civil siguen siendo palpables hasta el día de hoy y no hay salvadoreño que no recuerde ese conflicto armado, aunque sea de forma vaga a través de su infancia.

Visitar el Museo de la Revolución en Perquín es la mejor manera de entender las causas y las consecuencia de la guerra de El Salvador. Fue fundado por guerrilleros que recopilaron testimonios, objetos y datos históricos para contar ese trágico capítulo de la historia. Además, las visitas guiadas por ex combatientes son la mejor manera de comprender, por lo menos, una parte del complejo conflicto salvadoreño.

Museo de la Revolución en Perquín

7. Contemplar el efecto espejo de El Cuco

Las playas del sur del país no tienen nada que envidiar a la famosa playa El Tunco. El Cuco, por ejemplo, es una buena parada para relajarse durante un viaje por El Salvador. En ella hay resorts y hoteles con las mejores instalaciones para disfrutar de la playa durante la marea baja. Ese momento del día es cuando se puede caminar sobre una extensión de arena fina cuya humedad provoca un increíble efecto espejo.

La costa de El Cuco es, además, zona de desove de tortugas marinas, por lo que hay que comportarse de forma responsable cuando se visita esa playa. Aunque hay algunos proyectos privados para recuperar los huevos y ayudarlos a nacer, aún no hay una concienciación de la población local, por lo que es posible ver a algunos vendedores de huevos de tortugas. En esos casos lo mejor que se puede hacer es rechazarlos amablemente y avisar a alguna de las organizaciones privadas de la zona que trabajan con estos casos.

espejo de El Cuco en el Salvador

8. Disfrutar de la hospitalidad salvadoreña

Si algo se recuerda con cariño después de un viaje por El Salvador, es a los salvadoreños. Su hospitalidad y curiosidad por los viajeros hace que un recorrido por este país esté lleno de agradables encuentros. Siempre dispuestos a ayudarte, los habitantes de El Salvador hacen que viajar por el Pulgarcito de América sea muy fácil y esté lleno de buenas historias que contar.

viajar a El Salvador

¿Te ha sorprendido esta lista de cosas que hacer en El Salvador? Este pequeñito país no suele incluirse en los recorridos por Centroamérica debido al desconocimiento que hay sobre él, pero también a causa de su fama de ser uno de los países más peligrosos de América.

A pesar de su historia reciente, El Salvador es un país seguro para los viajeros, aunque para que lo sea todavía más, es recomendable viajar con un seguro de viajes. El Salvador cuenta con un sistema de salud público pero ineficaz, por lo que una enfermedad puede llevarte a necesitar asistencia privada, lo que encarecería extremadamente tu viaje. Con el seguro IATI Estrella, por ejemplo, viajarás tranquilo y sin preocuparte por posibles accidentes o enfermedades.

Artículo escrito por Irene Garcia, de Crónicas de una argonauta