Cómo organizar tu economía viajando por el mundo: tarjetas o dinero

Viajar por el mundo requiere logística, planificación y decisiones. Una de ellas, muy importante además de la elección de un buen seguro de viajes, es qué llevar encima: ¿Viajar con tarjeta o efectivo?

Aquí unas ideas fruto de mi experiencia de once años lidiando con mi banco, en España, y con decenas de tipos de moneda.
1- Es conveniente llevar tarjeta de crédito o de débito pero con un límite para gastar, lo que te evita problemas si te roban las tarjetas y no te da tiempo a cancelarla. Yo uso sólo una tarjeta, aunque hay gente que prefiere llevar dos.
2- Infórmate antes de salir cuál es la comisión por retirar dinero del extranjero, y en qué cajeros es más barato. En este sentido a veces la Visa, la Mastercard u otras, pueden tener diferencias.
3- Guarda la tarjeta en un lugar separado de tu pasaporte y de los equipos electrónicos. La banda magnética de la tarjeta puede desactivarse fácilmente, como le ocurrió a mi amigo Roberto que vino a verme a Jordania, y en la última cena en un restaurante de Aman, tuvo que juntar toda su calderilla y la mía para pagar el banquete.
4- Lleva dinero en efectivo. Al menos quinientos dólares y unos trescientos euros. Es un dinero que te puede hacer falta en países que no aceptan tarjetas o de cuyos cajeros no se puede sacar dinero. Así me ocurrió en Irán. Los dólares son mejor aceptados en el mundo que los euros.

Viajar_con_tarjeta_o_efectivo

5- Guarda el dinero repartido en diferentes lugares y acuérdate de dónde está. Yo encontre unos doscientos dólares de moneda de Mauritania llegando a Angola, dentro del filtro de agua.
6- Si puedes paga tus compras con tarjeta. Eso hacía en Estados Unidos y de esa manera no iba gastando mis ahorros en efectivo. Incluso había lugares en los que la tarjeta era el único modo de pagar.
7- Los dólares y los euros es mejor que no los enrolles o dobles. Si lo haces se estropean y puedes tener dificultades para cambiarlos. Hay países como Uzbekistán que no admiten el cambio de billetes de dólar menor de cincuenta o que te ofrecen un cambio peor si el billete es inferior a esa cifra. Lo mejor es llevar billetes de cien dólares, bien planchaditos y sin marcas.
8- Antes de salir revisa la fecha de caducidad de tu tarjeta. Yo he tenido que solicitar tres veces la renovación de la mía y el banco no es muy amigo de enviarte la tarjeta al extranjero.
9- Si estás gastando tu reserva de dólares aprovecha a extraer dólares de países cuya moneda es el dólar: no sólo Estados Unidos, también Ecuador y hasta en Perú es posible.
10- Si recibes la visita de un amigo, trasfiérele dinero de tu cuenta para que te traiga nuevas reservas en efectivo.10- Si recibes la visita de un amigo, trasfiérele dinero de tu cuenta para que te traiga nuevas reservas en efectivo.
11- Algunos seguros de viaje tienen la cobertura “Adelanto de fondos”, que puede ser muy útil si por una desgracia te quedas sin nada, ya que además te lo hacen llegar allá donde estés.

Y no olvides lo que dice el poeta Luis Rosales: “el dinero sólo es dinero cuando se gasta“.
Hasta entonces sólo es papel. Una tarde en África que acampé e hice un fuego para espantar a los animales sentí un olor a plástico quemado. Recordé que dentro de la alforja de la comida había guardado, bien enrolladitos y dentro de un botecito de plástico rodeado por unas hierbas aromáticas, quinientos euros. Era mi caja fuerte.
Me levanté corriendo y le di una patada al bote apartándolo de la hoguera. Un minuto más y habría quemado quinientos dólares. Me hubiera dado un sofocón de calor.

Desde la ruta, día 4.060 de la vuelta al mundo, Álvaro Neil, el biciclown.